Como cada tarde, cuando mis tareas diarias me dejan un ratito para pensar, para estar relajada, me siento aquí, en este rinconcito de mi casa, que ya muchos de vosotros conocéis, abro mi correo por si alguno de vosotros me ha escrito y al tiempo escribo varios, destinados a compañeros que están un poco aislados y descomunicados del grupo, miro cada dato que pueda variar de un día a otro y estoy al corriente de todo lo que pasa entre nosotros. Pero también yo, como todo ser humano, tengo mis momentos bajos, no creáis que siempre soy energía pura, que siempre tengo ganas de todo, hay veces que me cuesta hacer lo más mínimo, pero intento seguir adelante.
Hoy tengo un momento de esos tontos, donde estoy analizando todo lo transcurrido en estos últimos meses, y me siento un poco triste, no por todos vosotros, ni por lo que hemos conseguido, sino por todos aquellos que a pesar de estar al corriente de todo, se han quedado al margen de cuanto estamos viviendo y nos queda por vivir.
Hay momentos donde no puedo entender, como estas personas no quieren recibir ese cariño que les estamos ofreciendo, ya no se trata de que tengan o no recuerdos, de que sientan más o menos, de que aquellos años fueran muy o poco importantes, sólo se trata de compartir unas horas, unos minutos, de sus vidas.
Sé, y puedo entender que cada uno tiene sus obligaciones, su familia, porque yo también las tengo, porque yo también soy humana como ellos, con mis problemas, con mis dudas y con todo lo que cada uno de nosotros llevamos dentro, pero a pesar de ello, quién se puede negar a recibir lo que nosotros estamos dispuestos a dar?, sólo pretendemos pasar un día agradable, compartir momentos de ahora con los muchos o pocos recuerdos de antes. Acaso no es fantástico encontrar personas dispuestas a darte un abrazo?, personas que se alegren de verte, de saber que estás bien, de interesarse por tu vida, por cómo te fué, por cómo estás.
Amigos míos, todos y todas, en qué mundo vivimos?, si ya no podemos ni siquiera buscar un hueco para recibir el amor que nos están ofreciendo.
Hemos construido una gran ilusión, hemos puesto mucho empeño y sé que somos muchos los que alimentamos ese sueño, pero a veces, me siento triste, por no haber conseguido a pesar de mi tesón, que todos pudiésemos formar parte de este sentimiento. Ya sé que me diréis que hemos conseguido mucho, que han pasado muchos años, sí, lo sé pero ese era mi sueño y para mí, es como dejar el mantel de Isa Rus sin terminar, o esas muñecas cabezonas que hacíamos en hogar, sin ojos o sin pelos, es como dejar uno de mis cuadros a medio pintar, o la carrera de Isa sin llegar a la meta.
Desde el 6 de noviembre, no hay día que no trate de conseguir algo nuevo, pero ya sé que soy impulsiva, voluntariosa y cabezona, pero también sé que no soy todopoderosa y que lo que es será y nada más puedo hacer, también sé que este empeño era difícil, pero todo iba tan sobre ruedas que creo que me ilusioné demasido.
Mis niños y niñas perdidos, como vuestra mamita, me siento muy orgullosa de haberos encontrado a todos y de que todos podáis volver a comunicaros si es vuestro deseo, pero también me siento un poco triste por no conseguir que todos podamos estar juntos aunque sólo sea por un día.
Sé que no tendremos otra oportunidad de volver a encontrarnos , como sé que muchos de nosotros no volveremos a despistarnos, pero no puedo negar que me apena el que no aprovechemos esta oportunidad que tenemos de volver a a estar juntos de nuevo, con nuestras familias, nuestros hijos, los maridos, las esposas.
Sé que muchos me comprendéis perfectamente, hasta nuestro amigo el fantasma creo que me comprende, y como sé que ya me vais conociendo, espero que estos momentos sinceros e interiores que hoy comparto con todos vosotros, sean sólo mis pensamientos que a veces me suenan en voz alta y que os traslado porque esto también soy yo.
Ana como bien dices tú, "donde el corazón te lleve", espero que en el mes de junio muchos corazones quieran llevar a mucha gente a ese delta que nuestro amigo fantasma tanto nos repite,
atraidos por esa piedra que nuestra amiga Rus nos ofrece y conquistados por las ilusiones que muchos estamos poniendo en conseguir este encuentro.
Gracias a todos, por estar.
Besitos
