sábado, 16 de febrero de 2008

Las malditas prácticas de oficinas

¡Hola a todos y a todas! La verdad que siento un gran cosquilleó, ahora que me atrevo a escribir en el blog y que desde sus comienzos se me había resistido un poco. He leido y releido todas vuestras historias y me ha servido (me imagino que como a la mayoría) para recordar los años vividos en la laboral y que se encontraban, no olvidados, pero sí alojados en un sitio un poco profundo.
Tengo que deciros que por conocimiento de antiguos alumnos de otras promociones, sabía que se estaban organizando este tipo de encuentros (coincidiendo con los 25 años) y me preguntaba el por qué de no haberlo hecho nosotros, así que cuando tuve la primera noticia de esta movida la cogí con mucha alegría (o como diría el rey "con orgullo y satisfacción").
Leyendo todas vuestas vivencias y ahora, con la distancia del tiempo, tengo la sensación de que estuve en la Uni, pero no llegúe a compartir muchas cosas, ni con la Uni, ni con su gente, ni con vosotros, quizás porque el atletismo me quitaba mucho tiempo, entrenaba cuando vosotros estábais comiendo y comía cuando estabáis tumbados en el cesped o "acoplaos" en alguna residencia (la de mi gente era la Residencia Nº 1, sin duda la mejor) y ahora echas en falta el haber compartido más cosas, pero bueno, cada uno, en su momento elige que hacer o con quién ir y cuando pasa el tiempo, compruebas que a lo mejor podrías haber hecho otras completamente distintas y que añoras.
Pero a pesar de ello, no voy a ponerme triste, meláncolico, ni nada parecido, porque con la edad que tenemos, debemos emplear el tiempo en "sexo, droga y rock an..." y al hilo del título de mi entrada os quiero contar una de mis anédotas.

No era el clásico empollón, pero si que sacaba buenas notas, excepto en mecanografía, con la Srta. Pilarrrrrrr. Un día, en un exámen de la asignatura de prácticas de oficinas (con el Sr. Poyatos), os acordáis, que si ordena las fichas por este orden, que si vuelves a ordenarlas por este otro, que ahora las desordenes, que si los escrititos deben ir completo, dirección, fecha y sello de la empresa (maldito sello), pues bien, había que redactar varios escritos y tuve la genial idea de que para el sello de la empresa, utilicé el slogan de "nucleares, no gracias", rodeando a un sol que sonreía, resultado del exámen "suspenso" y charlita con el Jefe de Estudios y la verdad es que no entendí por qué me suspendieron ya que era un sello como otro cualquiera (que cándidos éramos entonces).

Mis querid@s amig@s seguirimos en contacto, para los que vayáis a la comida del día 28, pasároslo de puta madre, yo no puedo ir, estoy de viaje en el Cto. de España de Campo a Través (continuo en el mundo del atletismo).

3 comentarios:

Conchi dijo...

Rafa, amigo, te estrenastes, ya ves que no cuesta tanto y seguro que te seguirás animando. Dices que te faltó tiempo para compartir, seguro que nos faltó a todos, pero nunca te arrepientas de lo que has hecho, sólo debemos arrepentirnos de lo que no hacemos y seguro que el atletismo te ha proporcionado a tí otros grandes momentos que nosotros no hemos vivido, como el voleibol me los concedió a mí, de todas formas, hoy que intentamos recuperar ese pasado, creo que seguramente a todos nos hubiera gustado compartir mucho más de lo que lo hicimos entonces, por eso estamos todos dispuestos a retomar nuestra vieja amistad, para continuar y llenar esos vacíos que dejamos en el pasado. Nunca es tarde y para la amistad siempre es buen momento, así que amigo Rafa vamos a recuperar ese tiempo perdido lo mejor que podamos, pues como tú dices a nuestra edad tenemos que aprovechar todo lo mejor que podamos y disfrurtar de la vida con intensidad, pues en definitiva eso es lo que cuenta. Besos

José Luis Martín Puga dijo...

Bienvenido al club de los que han tenido a bien insertar sus vivencias en este blog. Es de admirar que después de 27 años sigues involucrado con el deporte de alta competición. Desconozco si lo haces como entrenador de alguna nueva promesa, o si todavía compites a tus 45-46 años, lo cual desde mi punto de vista tendría mucho mérito. Otros en cambio después de perder de vista al castigador Ruben Camacho, y sus famosas escalinatas, nos hemos entregado al placer de degustar todos los placeres culinarios que mejor cuidan de nuestro colesterol, es decir,las morcillitas, las tocinetas, chorizitos, chuletitas, etc.... Y claro así lucimos un palmito tipo Torrente, que particularmente, no ve va nada mal.
¡Que carajo!, lo que es envidiable es tu disciplina y tu constancia, que ya nos explicarás en junio como lo consigues y los sacrificios que te cuesta.
Bueno, compañero, mientras tu te meriendas de un asalto las pistas de los campos a través, otros desde el sillón de casa y con el mando a distancia, veremos el campeonato (si lo echan por la tele) con el mando a distancia, una cervecita y las tapitas de rigor. ¡Ánimo, campeón! Un abrazo.

Jose M. Ingles dijo...

Hola Rafael, te felicito por tu fuerza de voluntad, pues debo de reconocer que hasta hace cuatro años en el que al mirarme los pies me di cuenta de que si seguía por este camino llegaría un momento en el que no me los vería, o que valdría la pena que la gente me saltara a que me rodeara, practicaba los tres deportes nacionales que como una gripe se han extendido de España al resto del mundo, a saber: El Sillonbol, La barra fija y el levantamiento de vidrio, desde entonces estoy haciendo deporte.
Si, debo de reconocer que la Residencia 1, con Don Antonio a la cabeza, fue la mejor, pero que me dices de los dos últimos años que nos pusieron a todos los de FP2 en la residencia 6. Saludos